
Los Hornos de convección son muy utilizados por la forma rápida y sencilla de cocinar que otros hornos convencionales. Son equipos de maquinaria hostelería que al utilizar combinaciones de calor radiante y vapor realizan la cocción de alimentos. La convección es el proceso de transferencia de calor entre elementos de distintas temperaturas. La transferencia se realiza mediante el movimiento de fluidos, estos pueden ser gas o como en este caso aire. En el caso de los hornos que utilizan la tecnología de convección aumentan la tasa de transferencia de calor a los alimentos.
Como funciona un horno de convección
Su mecanismo es muy sencillo, dentro de la cámara de horno el calor radiante circula de manera uniforme gracias al ventilador en su interior. Esto permite tener una temperatura optima de operación. El proceso de cocción se realiza cuando el calentador del horno eleva la temperatura del aire en el interior del horno.
Al cocinar en un horno de convección, la temperatura es algo diferente en comparación a un horno normal. Para entenderlo mejor podríamos decir: si tenemos una receta para el horno convencional a una determinada temperatura. En un horno de convección debe ser menor, esto debido a que el calor circula en ella y en una normal no. La diferencia se da a temperaturas media altas, a bajas temperaturas no difiere mucho.
Es importante que estos hornos sean puestos en cocinas donde circulen suficiente aire. Esto para que el horno no se sature y se produzca un malfuncionamiento.
Ventajas de los hornos de convección
Los hornos de convención son ideales para preparar alimentos como carnes y vegetales. Otorgan una textura más crujiente (tostados), y en la cocción de masas como empanadas o comidas parecidas ayudan a que se levanten mejor. Esto debido a que generan más vapor. Algunos alimentos debido a la manera de cocción no es necesario voltearlos una y otra vez, simplemente verificarlos hasta que estén hechas.
Aproximadamente el tiempo de cocción entre un horno convencional es de un 20 a 25% más rápida. Esto genera un menor gasto de energía, como mencionamos la temperatura es más baja, aproximadamente un 30% menos en comparación a los hornos normales. Como estos hornos no operan en temperaturas tan elevadas no se genera desperdicio de energía. Con los aislamientos térmicos que traen dentro todo el calor se aprovecha en el interior. En algunos casos los alimentos conservan lo mejor posible la composición vitamínica.
Alimentos que mejor se hacen en un horno de convección
La mayoría de alimentos sobre todo aquellos que son para asar o caramelizar son ideales para estos hornos. Un buen corte de carne permite asarse mejor, obtener una corteza crujiente y un interior jugoso y bien hecho. En panaderías, las galletas quedan bien doradas y crujientes. Sin embargo, para pasteles los resultados no son óptimos, esto debido al calor seco que desprende el horno de convección. Se puede utilizar el horno de con otros elementos como una bandeja cubierta de papel aluminio para evitar que la comida pierda humedad. Una buena alternativa para deshidratar alimentos como nueces, frutos secos u otros frutos secos.